Un grupo de científicos de Estados Unidos determinó que este animal puede tiene la capacidad inusual de recuperar órganos y funciones del cuerpo propios.
El ajolote o salamandra mexicana, un anfibio endémico de los lagos de México puede tener en su genoma una solución crucial para que las personas paralizadas puedan volver a caminar.
Mide entre 15 y 30 centímetros, que posee la capacidad de regenerar extremidades y órganos internos al sufrir graves lesiones corporales, incluso el cerebro. Se explicó durante el Encuentro de Biología Experimental 2018 que existen mecanismos que permiten al animal activar esta ventaja a nivel molecular.
“Los humanos tienen una capacidad de regeneración muy limitada, mientras que otras especies, como los ajolotes, tienen una notable capacidad de regenerar funcionalmente las extremidades, el tejido cardíaco e incluso la médula espinal después de una lesión”, manifestó la especialista Karen Echeverri en declaraciones a Science Daily.