En Nuevo León, la figura de candidato independiente, está destinado al fracaso, ya que el efecto “Bronco” decepciono a la mayoría de los regiomontanos que creyeron en las promesas del ahora Gobernador con licencia Jaime Rodríguez Calderón, quien está en busca de la Presidencia de México con la misma fórmula que le dio éxito en la sultana del norte.
Entre las promesas del Bronco que más le reprocha la gente fue el de “chapulinear” o sea, buscar otros puesto público sin terminar el anterior.
Los nuevos independientes, los que en verdad son ciudadanos, libres de cualquier enlace con la política actual, sufren por no encontrar empatía ciudadana para la recolección de firmas; solo se les facilitaría el camino siendo del “grupo de independientes” que apoya el Gobierno Estatal y cuenta con una estructura electoral importante (ejem. Yamilet Orduña), o de algún partido político que tenga intenciones de dividir el voto.
Y la opción de moda , que no debería llamarse independiente, es pertenecer a un partido político, renunciar a él, llevarse la estructura política y electoral, reunir las firmas según las reglas del INE y contender sin abanderar a ningún partido político.
Lo destacado, es que el modelo independiente está “quemado”, la ciudadanía no confía en estos candidatos.
Según el periódico ABC de Monterrey, a través de un artículo en su sección local, se comienza a mostrar el efecto “Bronco Independiente”, pues nueve ciudadanos se inscribieron como aspirantes independientes a diputado local, y concluyeron que no podían cumplir con las 1500 firmas requeridas y desistieron días antes de que se terminara el plazo este 6 de febrero.
Nilda Diamantina Flores Flores juntó 159 firmas en el distrito décimo sexto, mientras que José Juan de Dios González Govea llegó a las 122. Ambos desistieron.
Indira Kempis, en el distrito seis reunió 30 apoyos y desistió para unirse a Movimiento Ciudadano.
En el distrito 8, Alicia Margarita Ayala Medina juntó 20 firmas, al tiempo que Cynthia Lizbeth Robles Welch envió 12 en el distrito 3. Ambas desistieron.
Algunos no reunieron ni una sola firma. Es el caso de Liliana María de Guadalupe Leal González, en distrito 2; Leonel Gerardo Jasso González, del distrito 4, y Marcela Odriozola Guajardo, del distrito 18.
Esto lo informó el presidente de la Comisión Estatal Electoral, Mario Garza. “Están en su derecho se desistir”.
“Desconozco las causas del desistimiento. Nosotros le damos vista al INE para que se les cancelen las cuentas y todo lo que tiene que ver con sus procesos de recaudación de firmas”, dijo.
Cynthia Robles Welch, una de las aspirantes, justificó su desistimiento, argumentando que ella sólo quería ver cómo funcionaba y no le gustó.
“Ni siquiera emprendí la búsqueda de las firmas. No me gustó. Yo traía como otra idea y realmente desprioricé para mi bienestar. La verdad es que preferí dejarlo. El proceso fue muy cansado simplemente para ser precandidato”, afirmó.