El precandidato de la coalición “Todos por México”, José Antonio Meade Kuribreña, reconoció este día que el comentario racista del líder nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Enrique Ochoa Reza, fue un exceso, sin embargo, dijo, “es natural”.
Meade Kuribreña habló por primera vez de las declaraciones de Enrique Ochoa, quien llamó “prietos” a los militantes desertores del PRI que han decidido unirse a las filas del Movimiento Regeneración Nacional (Morena).
Ochoa eliminó el tuit y ofreció disculpas en su cuenta de Twitter.
“El día de hoy en Tabasco me referí a los PRIistas que se han pasado a Morena como PRIetos. Mi comentario jamás fue referido a las personas que tienen mi mismo color de piel, del cual me siento muy orgulloso. Ofrezco una sincera disculpa. Esta campaña será de propuestas y unidad”.
Los comentarios racistas de Ochoa Reza han caído como balde de agua fría a la campaña de José Antonio Meade, quien se ha mantenido en la tercera posición en la mayoría de las encuestas a pesar del discurso “triunfador” del jefe de campaña, el ex Secretario de Educación, Aurelio Nuño.
No ha sido el mejor cierre para una precampaña en la que el cinco veces Secretario de Estado ha tratado de remontar los negativos que arrastra del Gobierno del Presidente Enrique Peña Nieto. Meade, un ciudadano que no es miembro del Revolucionario Institucional, ha debido tomarse la foto con líderes sindicales y personajes poco apreciados del partido que lo acoge, mientras los escándalos de los ex gobernadores han corrido en paralelo con su promesa de que abatirá la corrupción.