Ayer Tigres de la UANL y Rayados de Monterrey, nos dieron un gran espectáculo de futbol, en el primer encuentro de la final por el Campeonato Nacional Mexicano, Liga BBVA Bancomer Mx. A pesar de las inclemencias del clima, pues el partido se jugó con una sensación térmica de 0 grados, y tormenta de agua-nieve, eso no parecía reflejarse en la cancha, ya que los 22 jugadores se entregaron en todo momento, con jugadas vistosas, entradas viriles y goles por ambos bandos.
Tigres fue el que domino la mayoría del encuentro, pero Monterrey descontó primero, en un gol fortuito, con regalo incluido del portero de Tigres, Nahuel Guzmán, quien tras un centro de tiro de esquina de Pato Sánchez y desvió de Nico Sánchez que termina por meter a su portería el propio guardameta de Tigres.
Pero esto no importo, y Tigres seguía dominando el partido, tenía maniatado al Monterrey y de inmediato llego su recompensa, cuando Funes Mori, ante un mal rechace de la defensiva, le comete una falta dentro del área a Valencia y el nazareno decreta penal, el mismo Valencia cobra la falta al estilo Panenka, y empata el marcador a un gol.
Y el juego se apretó en media cancha, y lo espectacular eran los contragolpes de ambos equipos, la rapidez de sus despliegues, por un lado Gignac, Valencia, Vargas, Aquino; y por el otro, Funes, Hurtado, Pabón. A pesar de lo incomodo de la cancha, nos regalaron pinceladas de toque de primera intención, pases largos con exactitud y remates que casi horadaban la portería enemiga.
Tigres tuvo más oportunidades de gol en el segundo tiempo, pero el portero Hugo González salió en plana grande, en conjunto con su defensiva que evitaron mínimo dos goles cantados de los universitarios. Y Monterrey no mostro el poderío ofensivo de la liguilla, pues se topó con buenas coberturas y una defensa casi perfecta, excepto por el gol gracias al error del portero.
Un buen partido, goles y mucha pasión en la tribuna, hacía tiempo que no teníamos un juego de final de estas magnitudes.
Por último el arbitraje del señor Isaac Rojas, que tuvo decisiones polémicas para ambos lados, le perdono la tarjeta roja a Valencia y Funes Mori, no marcó un penal a favor de Tigres por una mano de Basanta dentro del área, y hubo varias faltas de ambos conjuntos que merecían amarillas y rojas directas.
Pero todo lo dejaron para el segundo partido que será vibrante en la vuelta en el estadio Rayado, todo indica que seguiremos de pronóstico reservado, no hay favorito.