Lo que empezó el lunes como un apagón que afectaba solo a estados del norte de México, el martes escaló a cortes de electricidad en casi todo el país.
La red eléctrica de México, abastecida por la estatal Comisión Federal de Electricidad (CFE) y productores privados, sufrió un “déficit de generación” de energía que afectó a millones de personas.
Primero, en los estados fronterizos con EE.UU. unos 4,8 millones de clientes de la CFE se quedaron sin luz la mañana del lunes. En unas horas, la falta de energía se extendió a 23 estados, con 5,9 millones afectados.
Después, la situación escaló a nivel nacional durante el martes, afectando a millones: los cortes programados alcanzaron a 26 de los 32 estados del país, en los que no hubo electricidad por periodos de menos de una hora.
El gobierno de Andrés Manuel López Obrador apuntó a dos factores como causa de los problemas.
Por un lado la severa tormenta invernal que golpea desde hace días a Texas, el estado del sureste de EE.UU. que suministra gas natural a varias centrales generadoras de electricidad en México.
Por el otro está el precio de ese combustible, que se encareció 5.000 %, en los últimos días según los cálculos de la CFE.
En 2018, cuando López Obrador llegó al gobierno, México apenas exportó US$28 millones en gas natural, pero trajo del extranjero alrededor de US$7.320 millones. Y no hay grandes diferencias en los años siguientes.
Ese combustible es el usado para generar alrededor de 60 % de la energía del país. Y cerca del 80 % proviene de Estados Unidos, principalmente de los campos productores de Texas.