En la última década los siniestros dentro de la refinería Francisco I Madero son frecuentes, uno más grave que el otro.

Parte de mi infancia y adolescencia la viví en ciudad madero Tamaulipas, recorriendo la avenida Obregón, Linares, Necaxa, mis puntos de reunión con mis amigos eran el gimnasio Benito Juárez, la playa Miramar, playa paraíso, el Friday, la pirámide, la laguna del carpintero, los restaurantes a la orilla del panuco, la plaza de armas, entre otros negocios más específicos, como tiendas de comics o chispas (videojuegos).

Entre el olor a coque, las calles semi-pavimentadas (y la mayoría de las calles sigue igual) y el calor húmedo de la ciudad, así pasaba generalmente mis veranos cuando cursaba la educación básica, después radique el tiempo necesario para conocer la problemática que representa la refinería Francisco I Madero, pues también laboré, para una compañía externa, dentro de la gran bomba de tiempo en la que se ha convertido la “refinería”.

¿Por qué califico como bomba de tiempo a la refinería en Cd Madero?

Esto no es amarillismo, pero la historia es alarmante, en la última década los siniestros dentro de la refinería Francisco I Madero son frecuentes, uno más grave que el otro, pérdidas humanas, muchos casos sin las indemnizaciones adecuadas para la familia, y pérdidas materiales, millones de dólares consumidos por incendios, desbaratados por explosiones, son las primeras y obvias señales para pensar que en cualquier momento se vendría un accidente grave que dañe a ciudad Madero y sus alrededores, como en el año de 1966 en Poza Rica, Veracruz.

Y no solo es prender las señales de alarma en Ciudad Madero, también contemos los sucesivos conatos en Salina Cruz, Coatzacoalcos, Cd del Carmen, Cadereyta, entre otras refinerías, todo esto, y a dichos de trabajadores base de Pemex, por la falta de capacitación, inversión y la corrupción que existe dentro del organismo. A mí me constan dos acontecimientos dentro de la refinería Ciudad Madero, ambos por descuido en los protocolos de seguridad; y en el último accidente hace unos días, con la noticia de la muerte de un trabajador cercano a la familia.

Primer duda: Todos estos accidentes son parte de un montaje para desahuciar la tan lastimada dependencia petrolera, y darle un golpe mortal ante el secreto a voces de ser cedida a compañías extranjeras.

Siguiente duda: ¿Qué tipo de reprimenda se toman y en contra de quién cuando suceden este tipo de accidentes? Ya que PEMEX es muy hermético en estos casos, nunca sale a la luz pública si alguien fue despedido o mínimo si se le llamo la atención a quien estuviese a cargo del área del siniestro ¿Estarán capacitados debidamente capacitados los ingenieros o funcionarios de mando?¿Quién contrata y que procedimientos se piden?

Y a punto de vista personal, es tan aberrante la situación en PEMEX que ni el director actual ni el anterior tiene un perfil en ingeniería petroquímica o similar, alguien que en realidad ayude al fortalecimiento de la dependencia.

Accidentes en la última década

Como última parte de este breve relato les doy a conocer algunos de los accidentes en la última década en la refinería Francisco I Madero, solo los encontrados en diversos medios de comunicación de la entidad de Tamaulipas y Nacionales:

Agosto 2012 Planta hidrosulfúrica U300
Septiembre 2012 planta catalítica
Marzo 2013 Tanque 3 coque
Febrero 2014 planta de enfriamiento
Abril 2014 Caldera MP-B-3
Mayo 2014 Bomba de aceite esponja D31
Julio 2014 Almacenamiento gasolina MJN-T510
Agosto 2014 Planta coque
Septiembre 2016 ruptura tubo abastecedor de caldera CB2N
Enero 2017 Fuga de ácido sulfhídrico

Como ciudadanos hay que exigir mejoras en la seguridad de la refinería, porque un accidente de grandes dimensiones afectaría gravemente a Ciudad Madero.